¡Hola!
En la entrada de hoy me gustaría hablaros de los libros que tengo actualmente en mi mesilla de noche, y habéis leído bien, libros en plural.
No he pasado una época fácil, todavía estoy intentando sobrellevar la ansiedad que estoy padeciendo pero al menos he podido empezar a recuperar mi afición a la lectura. Lo echaba mucho de menos y creo que va a ser un buen verano en ese sentido. Ahora mismo he dejado un poco atrás esa época en la que leía muchas novelas juveniles y románticas, seguramente siga leyendo algún que otro libro de esos géneros, pero también tengo ganas de explorar otro estilos un poco más.
El primer libro de mis lista es el comienzo de una larga saga, creo que de 6 libros si no me equivoco, y es de fantasía épica. Se trata de una publicación de Ediciones Labnar, Ylandra. Tiempo de osadía, de Roberto Navarro Montes. Este es un libro que me llamó la atención desde el principio, aunque no soy una gran conocedora del género. La edición está muy cuidada y contiene un mapa en las guardas.
Me emocioné cuando tuve la oportunidad de leerlo y creo que es una de los libros que más tiempo lleva en mi mesilla de noche (sobre todo leo por la noche, para quien quiera saberlo) y todo se debe a que empecé a trabajar justo cuando llegó el libro y no tuve tiempo. Ahora mismo estoy a punto de terminarlo y muy, muy pronto tendréis la reseña. Es un libro con muchos personajes y muchos puntos de vista, me ha recordado un poco a Canción de hielo y fuego por ese aspecto formal, pero es que a la vez no se parecen en nada. Eso sí, hay un mundo complejo y amplio y sé que las tramas se irán juntando en algún momento, es como empezar un laberinto gigante desde varias esquina diferentes y poco a poco todo se irá entremezclando.
No diré mucho más para no estropear la reseña pero creo que es una buena lectura para este verano si os atrae el género. Como he dicho, yo no soy una experta, así que creo que es una opción genial para quien quiera acercarse a él.
El siguiente libro que llegó a mis estanterías fue un envío sorpresa de Ediciones Palabra y se trata de Manual para damas sobre sobre el cotilleo y el asesinato. Este libro es la continuación de una serie que empecé hace un tiempo. Es clasificado como novela romántica pero su eje vertebrador es un misterio, en este caso un asesinato y el punto que la hace especial es que todos sucede en un ambiente de la alta sociedad londinense del siglo XIX, entre todo el protocolo y etiqueta de las damas de bien. Lo que me encanta de estos libros es el estilo de narración de la protagonista, que tiene mucho desparpajo y buen humor. La reseña llegará muy pronto también.
Recientemente he empezado La nación de las bestias. El señor del Sabbath, primer libro de una saga de Mariana Palova, escritora y artista. Este es un libro del que he visto muy buenas críticas y que ha recomendado un autor que me gusta, H. Kramer (podéis leer mi opinión de La hora sexta aquí) así que cuando tuve la oportunidad de leerlo no me lo podía creer.
La primera impresión es que se trata de una historia muy original y con mucha fantasía y magia. Creo que será una lectura diferente y significativa para mí este año.
Regreso a algo más de mi estilo, en el ámbito histórico con un libro que acaba de llegar y que no he tenido más que la oportunidad de ojear, se trata de Los cuatro vientos, de Kristin Hannah. Es un libro que se ha visto bastante por la blogosfera y tiene sentido porque su sinopsis promete una historia apasionante bien ambientada. Me encantan las novelas históricas, aprendo mucho y me sumerjo por completo en la ambientación así que tengo muchas esperanzas puestas en este libro. Le costó un poco llegar pero merecerá la pena.
Estas son mis lecturas actuales (la última más bien futura). Quería hablaros un poquito de ellas porque hace tiempo que no estoy tan presente por el blog y así hacía un repaso de lo que me ha tenido ocupada últimamente a nivel literario.
Si habéis leído alguno de estos títulos o vais a hacerlo no dudéis en dejarme más abajo vuestras opiniones y comentarios, procuraré responder y devolver los comentarios. Un beso enorme, ¡nos leemos!