Reseña: Simplemente enamorados, Mary Balogh

02 Simplemente enamorados

Título: Simplemente enamorados
Autor: Mary Balogh
Traducción: Claudia Viñas Donoso
Editorial: Books4pocket
ISBN: 984-84-92801-65-7
Año de publicación: 2010
Género: Romántica, Histórica, Adulta
2º de la serie Escuela Miss Martin

Sinopsis

Cuando Anne vio por primera vez a Sydam, se llevó el susto de su vida. De perfil, parecía el hombre más apuesto del mundo, pero al girarse le mostró el lado de su cuerpo que la batalla había dejado horriblemente desfigurado. Los dos eran seres marcados: él, por la metralla francesa; ella, pro el rechazo de la rígida sociedad victoriana, que no perdona a una mujer ser madre soltera. A ninguno les hace mucha gracia coincidir en la mansión de los Bedwyn. Anne sólo accede a acudir para que su hijo esté con otros niños. Sydam, cuidador de la propiedad, espera que los invitados se marchen pronto. Pero cuando los dos se encuentran, pronto descubren una fuerte atracción que culmina en una noche de pasión. Ante ellos se abre ahora un futuro de esperanza: la ocasión de derribar la muralla de soledad en la que se han refugiado, y de sacar a la luz sus más íntimos secretos…

Mi opinión:

Anne se convirtió en madre soltera siendo muy joven, desde ese momento su familia le dio la espalda y tuvo que buscarse la vida como pudo, trabajando de maestra en aldeas y más recientemente en la Escuela Miss Martin para señoritas, que se ha convertido en lo más parecido en un hogar para ella y para su hijo de nueve años.

Su gran amigo Joshua y su mujer, Freya, los invitan a pasar un mes de vacaciones en la casa de Gales del duque de Bewcastle, para que su hijo pase tiempo con más niños de su edad. A pesar de su poca predisposición al viaje, Anne accede para mejorar la vida del niño. Una vez allí conocerá a Sydam Butler, un hombre que le hará ver la vida con más posibilidades.

Sydam quedó gravemente herido durante la guerra, las cicatrices recorren toda la parte derecha de su cuerpo, donde ya no tiene brazo ni ojo. Su aspecto actual hace que la gente no sepa cómo actuar a su alrededor y los niños se esconden al verlo, por lo que decidió dejar su vida como hijo de un noble para dedicarse a ser administrador en una propiedad de Gales del duque de Bewcastle. Allí ha pasado años en soledad, sobreponiéndose a todo y aprendiendo a ser autosuficiente pese a sus heridas.

La llegada de Anne le cambiará la vida, por primera vez en años comienza una amistad con una mujer, una que es sincera con él, que también ha sufrido y vive marginada como él, de una manera diferente, pero que les permite entenderse como nadie. Pero los anhelos de una vida con amor para Sydam son siempre acallados por una vocecita que le recuerda que es demasiado horrible como para que una mujer tan hermosa quiera pasar su vida encadenada a él.

Cada uno con sus miedos, cada uno con sus sueños, estas dos personas llegarán a conocerse y a aprender, a pesar de los malos entendidos, a darse una nueva oportunidad.

Acabé leyendo esta novela por avatares del destino. Estaba yo en Facebook cuando en un post compartido desde la web El rincón de las novelas románticas anunciaba que había novelas de oferta a 2.80€ de autoras como Julia Quinn, Jo Beberly o Mary Balogh. No había enlace y no indicaban donde estaban disponibles, pero como yo ya había visto novelas románticas a ese precio en Amazon, decidí buscar ahí y me encontré con que la oferta que yo conocía tenía ahora nuevos títulos.

Busqué entre los que tenían ese precio (muchos ya estaban agotados y otros ya los había leído) y vi esta novela de Mary Balogh, que es una autora que me gusta mucho, pero antes decidí buscar un poco de información sobre él. Con una premisa inicial así, era difícil que me resistiera, así que me lancé a comprarlo y fue una muy buena decisión. Tenía las expectativas altas y Balogh las ha cumplido, vaya si lo ha hecho, me ha dejado impresionada por su maestría y esta será una de las novelas que entre en mi TOP de mejores novelas románticas históricas.

[Extracto del libro]

No esperaba con ilusión ese verano.

Se mantendría alejado todo lo que le fuera posible. Por lo menos intentaría mantenerse fuera de la vista de los niños; no quería asustarlos. La peor sensación del mundo era ver miedo, repugnancia, horror y terror en las caras de los niños y saber que era su apariencia la causa.

Pero vamos con mi opinión de una vez, así os explico por qué me ha gustado tanto y más en una época en la que estoy siendo bastante exigente con las novelas románticas.

Este libro pertenece a una serie de novelas ambientada en el universo de la serie Bedwyn, aunque en este caso dejamos a esta familia y nos centramos en las profesoras de un colegio de señoritas. No me acordaba, pero hace tiempo leí el primer libro de la serie, Simplemente inolvidable, y también leí todos los de la serie Bedwyn (que os recomiendo, ya que estoy) así que para mí ha sido fácil volver a tener presentes a estos personajes, aunque es un libro de una serie, así que se puede leer de forma independiente.

La trama de la historia, como muchas otras de Balogh, es sencilla y no hallaréis en ella subtramas policiacas, de misterio o de espías, con lo que ya suma un punto conmigo. Es una historia de personajes, no va a haber acción, ni grandes giros, no, porque el centro de todo son los dos protagonistas, y creedme que llenan la novela bien ellos dos solos.

Si esta novela me ha parecido obra de una maestra no es por la capacidad de la escritora de crear un universo ficticio verosímil y coherente, no es porque demuestre una desbordante imaginación o gran capacidad para hilar tramas, ni siquiera porque mantenga a quien lee la novela pegado a sus páginas… Mary Balogh hace aquí un estupendo trabajo con la psicología de los personajes. Este es un aspecto que siempre me parece muy importante en una historia y he leído infinidad de libros en los que los personajes no son nada reales, nada creíbles y a veces para la historia no importa, pero yo siempre lo valoro.

Tenemos aquí a una mujer que ha sufrido el rechazo de su familia, que ha sido madre siendo muy joven y además soltera, con lo que está condenada al ostracismo. Todos los movimientos que Anne hace son bajo la consciencia de lo que pensarán los demás sobre ella, sobre lo que especularán, sobre lo horrible que les parecerá su situación y aunque ha llegado a tener su círculo de amigas y seres queridos, no puede evitar sentirse sola.

[Extracto del libro]

—¿Y es feliz la mayor parte del tiempo?  —le preguntó ella. Aunque él había reconocido que se sentía solo.

—¿Feliz? ¿La mayor parte del tiempo? La felicidad es siempre algo pasajero, fugaz. Nunca es una estado permanente para nadie aunque muchos perseveremos en creer la tonta idea de que si ocurriera esto o aquello seríamos felices el resto de nuestra vida. Tengo momentos de felicidad como la mayoría. Tal vez he aprendido a encontrarla de maneras que pasarían inadvertidas para algunas personas. Siento el calor del verano aquí en este momento, veo los árboles y el agua y oigo esa gaviota invisible allá arriba. Siento la novedad de tener compañía cuando normalmente vengo aquí solo. Y este momento me produce felicidad.

Sydam tenía el alma tranquila de un artista, pero durante su juventud decidió ir a la guerra para demostrar su valentía, lo que lo llevó a una situación extrema que le provocó la pérdida del ojo y el brazo derechos, además de numerosas heridas y cicatrices, no solo físicas. Su vida dio un brusco y desagradable cambio, tuvo que decirle adiós a muchas cosas, pero ha luchado por ser independiente, por valerse por sí mismo y con paciencia llegar a superarse. Ahora se siente feliz en su tranquila vida, pero eso no deja de significar que sepa todo lo que se pierde y es muy consciente de su soledad.

La autora junto a estos dos personajes que son, a su manera, marginados sociales, a pesar de su ascendencia noble. Ambos saben lo que es el rechazo y la soledad, y se entienden. Veremos cómo se desarrolla esa amistad ante dos personas adultas que saben bastante bien lo que quieren en la vida, que han madurado mucho pero cuyos miedos y temores los llevan malentendidos que afectarán a su relación.

Mary Balogh es capaz de trazar una línea lógica en el avance de la relación de estos dos personajes, de darles unas reflexiones lógicas y muy humanas, con esto quiero decir que cometen errores verosímiles, que nos podemos creer porque son perfectamente entendibles, porque tienen anhelos que pueden parecer mundanos, pero que también son muy reales y todo ello adaptado a la realidad de la época. Este entendimiento de la psique humana, y no de una persona que ha tenido una vida, digamos corriente, sino de dos personas que han sufrido mucho con vivencias que les marcarán de por vida, creo que demuestra mucha valía por parte de la autora como conocedora del ser humano y a mí me ha dejado sorprendida.

[Extracto del libro]

—¿Me permite que le enseñe la casa? —le preguntó.

—Sí, por favor. He estado esperando eso todo el día.

Entonces él hizo algo terriblemente penoso, algo que no hacía desde hacía tiempo. Le ofreció el brazo derecho para que lo cogiera.

Y claro, no ocurrió nada. El brazo no existía.

Ella echó a caminar a su lado sin siquiera enterarse de que había hecho ese gesto.

Por un instante se había olvidado de que sólo era una mitad de hombre.

Es una novela que tiene un romance muy bonito y especial, realista, también, pero que no por ello deja de ser menos dulce. Si os gustan las novelas románticas y les pedís algo de complejidad a sus personajes, yo creo que esta historia os va a enamorar tanto como a mí. Es una lectura que recomiendo sin duda y que ha hecho que Balogh escale en mi ranking de autoras preferidas, porque aunque he leído novelas suyas bastante simples, veo que ha tenido una evolución brutal.

Una novela de personajes, con una trama sencilla y que llenan en su totalidad los dos protagonistas, dos personas que han vivido al margen de la sociedad por diferentes motivos. Una historia de amor y de amistad que demuestra un gran conocimiento de la psique humana por parte de la autora. A pesar de haber leído antes obras de Mary Balogh, con esta ha logrado volver a sorprenderme y sin duda para bien.

  

¡Hay que leerlo!