Y un mes más, tenemos poema. Ya sabéis que esta sección surgió porque este año tuve clase de Retórica y me parece bien descubrir nuevos poemas, aunque yo no me mueva con fluidez en este campo.
El que elegí para diciembre es uno que me gustó mucho por su sonoridad y encabalgamientos, me gusta como se rompen así las oraciones. La temática es religiosa, por esa etapa mística que tuvo el autor, Blas de Otero, pero a parte de la métrica, no os puedo contar mucho más de este soneto, solo que el yo poético busca con ansía a Dios.
Tú, que hieres
Arrebatadamente te persigo.
Arrebatadamente,
desgarrando
mi soledad mortal, te voy llamando
a golpes de silencio. Ven, te digo
como un muerto furioso.
Ven. Conmigo
has de morir. Contigo
estoy creando
mi eternidad. (De qué. De quién). De cuando
arrebatadamente esté contigo.
Y sigo, muerto, en pie. Pero te llamo
a golpes de agonía. Ven. No quieres.
Y sigo, muerto, en pie. Pero te amo
a besos de ansiedad y de agonía.
No quieres. Tú, que
vives. Tú, que hieres
arrebatadamente el ansia mía.
Blas de Otero
Pues no había oído hablar de este soneta y creo que tampoco del autor y, a pesar de que sea religioso (lo digo porque yo no), me ha gustado mucho. Muy bonito ^^
ResponderEliminarPor cierto, me llemo tu botón de afiliación. ¿Te llevas el mío? ¡Un besito!
Hola Inés, me alegro que te haya gustado el poema. Yo tampoco soy religiosa, pero no creo que eso me vaya a impedir disfrutar de poemas dirigidos a este tema, igual que con sucede con otras temáticas de las cuales no soy afín.
EliminarAhora coloco tu banner y gracias por llevarte el mío.
Saludos,