Reseña: Hija de humo y hueso, Laini Taylor

01 Hija de humo y hueso

Título: Hija de humo y hueso
Autor: Laini Taylor
Traducción: Monserrat Nieto
Editorial: Alfaguara
ISBN: 984-84-2041098-2
Año de publicación: 2011
Género: Juvenil, Fantástico
1º de la trilogía Hija de humo y hueso 

Sinopsis

Karou es una estudiante de arte de 17 años que viven en Praga. Pero ese no es su único mundo. A veces, Karou desaparece en misteriosos viajes para realizar los encargos de Brimstone, el monstruo quimera que la adoptó al nacer.

Tan misteriosa resulta Karou para sus amigos, como lo es para ella su propia vida: ¿cómo es que ha acabado formando parte de una familia de monstruos quimeras? ¿Para qué necesita su padre adoptivo tantos dientes, especialmente humanos? Y, ¿por qué tiene esa recurrente sensación de vacío, de haber olvidado algo?

De pronto, empiezan a aparecer marcas de manos en las puertas, señal de que la familia de Karou corre grave peligro. Karou tratará de cruzar al mundo quimérico para ayudarles, pero es perseguida por los serafines. Entre ellos se encuentra Akiva, un ángel arrebatadoramente hermoso al que Karou está unida de una forma que ni ella misma puede imaginar.

Mi opinión:

Korou estudia arte en Praga, tiene 17 años y a pesar de su pelo azul, sus múltiples tatuajes y sus curiosos dibujos, podría pasar por una chica normal. No obstante, está lejos de serlo. Ha sido criada por quimeras, extraños seres cuyos cuerpos están formados por partes de animales y humanos. Brimstone es su padre adoptivo y aunque hay muchas cosas que no le cuenta a Karou, ella lo quiere y lo ayuda en su negocio, donde da deseos a cambio de dientes, algunos de animales y otros de humanos.

Karou nunca ha podido descubrir qué es lo que Brimstone hace con esos dientes ni sabe lo que se esconde detrás de una puerta que nunca ha podido cruzar. Tampoco sabe quiénes son sus padres y con el tiempo parece que se quedará sin saberlo, pues Brimstone no parece que vaya a contestar a sus preguntas.

A pesar de su doble vida, Karou intenta hacerle frente al enorme e inexplicable vacío que siente, pero su vida dejará de ser pacífica a partir del momento en el que marcas de manos aparecen en distintas puertas por todo el mundo, una de las puertas señaladas será la que la lleva a ella al Otro Lado, la puerta de Brimstone.

Akiva es un ángel serafín, él es un solado y toda su vida ha transcurrido durante la gran guerra que los ángeles tienen contra las quimeras. Cuando cumple su misión de marcar las puertas mágicas ve a Karou, una extraña muchacha que parece tener una relación con Brimstone y cuyas manos tienen dibujadas unas hamsas, un tatuaje con forma de ojo que la relaciona con las quimeras, pero que en ella no tiene sentido porque es humana.

Entre Karou y Akiva hay algo que no pueden explicar, una atracción poderosa que los confunde pero que no les permite estar lejos el uno del otro y es que en su pasado hay algo muy fuerte que los une.

He esperado mucho tiempo para poder leer este libro y la verdad es que ha merecido la pena, por ahí tengo que empezar. Hija de humo y hueso tiene un título tan extraño como muchos de los seres que la pueblan y aunque al principio puede resultar extraña, es una buena historia.

Aunque esperaba que me gustase, y me ha gustado, hay algunos detalles que no son tan redondos como a mí me gustarían, pero antes quiero hablar de otras cosas que sí me han gustado mucho, y la más llamativa es la presencia de unas criaturas que pocas veces aparecen en la literatura actual: las quimeras.

Lo que yo entiendo por quimera es un ser mitológico con cabeza de león, cola de serpiente y cuerpo de cabra. En este libro las quimeras son seres cuyos cuerpos están formados por partes de animales o humanos mezclados. Brimstone, el padre adoptivo de Karou tiene el pecho y los brazos de un humano, patas de animal, cabeza de carnero y ojos de serpiente. Poco a poco y a medida que avanza la historia sabremos más de estos seres y del mundo fantástico en el que Karou ha crecido y del que realmente no sabe mucho.

[Extracto del libro]

Lo que Kaz sintió no fue sorpresa, sino celos. Karou estaba volando, no cabía duda, pero acompañada. Se encontraba junto a un tipo que, Kaz tuvo que admitir –aunque para él reconocer la belleza en otros hombres era de homosexuales-, era guapo hasta parecer absurdo. Guapo hasta la exageración.

Muy poco sofisticado, pensó cruzando los brazos.

Por ahí leído que se cataloga este libro como una «historia complicada» y supongo que ese comentario hace referencia a que es difícil resumirla por las vueltas que da la trama y que la vuelven compleja, pero también muy interesante y que queda muy clara al leer la historia. La trama nos muestra, por lo tanto, una historia original en cierta medida, bien contada, con acción, amor y mundos diferentes al nuestro. Sin embargo, esa parte amorosa que tan importante es en esta obra no ha logrado convencerme.

Karou es una chica joven que ha tenido una relación amorosa con un personaje con aires de vampiro (o eso le gustaría) y se define como una chica misteriosa, segura de sí misma pero que a mí me ha parecido un poco inmadura. En realidad, los personajes «juveniles» que aparecen en la historia me han parecido todos un tanto inmaduros. Akiva es el otro personaje importante, un ángel que aunque se mantiene joven tiene más de cincuenta años pero cuya personalidad es más cercana a la de un adolescente. No tiene por qué ser algo malo, pero a mí personalmente no me ha gustado mucho el aire juvenil de estos personajes, creo que si tuvieran un tono más serio la historia podría ser más potente, pero eso es algo que me hubiera gustado a mí aunque ya sabía que este libro se cataloga como juvenil.

Akiva se presenta como un personaje muy atractivo, es un ángel, un soldado (aunque no de Dios), es serio, frío y también letal. Sin embargo, poco después de su aparición (en la que siempre se resalta su perfección física) vemos que esta primera imagen de él no es así. (*Spoilers. Me sorprendió ver lo romántico que era este personaje, inocente en algunos aspectos. La verdad es que la relación amorosa en este caso, aunque existe una justificación, es un poco instant love y nunca me ha gustado eso. Todo sucede muy rápido, incluso cuando no tendría por qué, el amor está ahí desde el principio como algo predestinado. Me ha recordado incluso un poco a Romeo y Julieta, con eso de dos mundos enfrentados ante el amor de dos jóvenes. Por otro lado, no me suelen gustar estas historias en las que la pareja ya había tenido una relación previamente y después se reencuentran en otra vida.*Fin spoiler.)

[Extracto del libro]

Se elevó por el aire hasta colocarse frente a él, y el ángel la observó. Simplemente la observó. Su mirada transmitía calor a sus mejillas, a sus labios. Era como una caricia. Tenía unos ojos hipnóticos y unas cejas negras y aterciopeladas. Era cobre y sombra, miel y amenaza, pómulos afilados como cuchillos y en la frente un mechón de pelo afilado como una daga. Todo eso y el crepitar mudo de un fuego invisible. Delante de él, Karou sintió el murmullo de la sangre y de la magia, y algo más.

Tanto Karou como Akiva son los personajes con más presencia, el que más me intrigó fue Brimstone y la amiga de Karou está un poco estereotipada. No sé por qué todas las protagonistas de libros tienen que tener una amiga «alocada». Por otra parte, aunque los protagonistas principales están bastante bien construidos y en general me gustaron, no son de mis personajes favoritos, necesitaría que fuesen un paso más allá.

De todas formas, la novela me dejó un buen recuerdo, disfruté leyéndola gracias a la intriga de saber lo que Brimstone hacía con los dientes y cómo se constituía su mundo y esa guerra que tanto les preocupa. Tengo ganas de saber cómo se desarrollaran los acontecimientos y las reacciones de Karou ante las noticias de Akiva. Es una historia diferente, eso desde luego, que entreteje bien las tramas, que nos engancha con intriga, que tiene acción y amor (demasiado dulce e idealizado para mí) pero que merece mucho la pena. Estoy muy contenta de tenerlo en mi estantería y estoy desenado leer la continuación.  

Una historia por la que he esperado mucho pero que merece mucho la pena. Una novela diferente gracias a la presencia de seres como las quimeras, los deseos intercambiados por dientes y sus protagonistas con aspectos poco comunes.

 Muy recomendable